martes, 25 de febrero de 2020

PROMESAS


Ese viernes fue aún peor para Robert.
Horas de consulta y el estrés de atender dos largas urgencias en quirófano, le agotaron.
Atlético, con cuarenta años y poco, conservando todo su cabello con briznas de plata, salió de la segunda operación rogando en un grito silencioso poder dormir, cuando la vio.
Exhausto, con sus atractivos ojos verdes empequeñecidos y hundidos en unas oscuras ojeras, quedó paralizado ante su presencia. Mildred, pese a contar ya con casi cuatro décadas, estaba recientemente titulada en enfermería de quirófano. Tenía una luz atrapante en su mirada inquieta color café. Nadie quedaba indiferente.
Una media melena castaña clara, con ondas un tanto desordenadas, enmarcaban un rostro que, junto a su delgadez, le conferían un aspecto aniñado. Conocedora de sus encantos, los utilizaba a su antojo, y Robert no quedó inmune. 

─Buenas noches. Bienvenida, señorita... ?
─Mildred, pero llámame Mily.
─Encantado, soy el doctor Ávila, pero seré Robert, para ti. 
Ah! Un consejo: recuerda prometer a los pacientes que se recuperarán. Necesitan optimismo para sanar.

Sostuvieron su mirada unos segundos más antes de que Robert saliera.

Cirujano establecido, ya no hacía guardias en fin de semana. Aunque a veces, ante alguna emergencia debía abandonar su descanso así fueran las cuatro de la madrugada. Transcurrió su sábado tranquilo con su esposa e hijo. En su mente permanecía aquella mirada.


Mily absorbía con interés sus nuevas obligaciones, necesitaba emanciparse económicamente para acabar su matrimonio sin sentido.

Lunes. Turno de tarde para ella, donde compartiría con Robert su primera operación. Al acabar coincidieron en la puerta de la cafetería:
─Puedo entender tu inexperiencia ─comentó muy serio Robert, haciendo un esfuerzo por disimular la atracción que le provocaba─ pero el paciente no admite que te tiemble el pulso.
─No ha sido mi inexperiencia ─le contestó Mily─ mirándolo impúdicamente de arriba abajo solo un instante, comenzando así, el juego del gato y el ratón.
─Y descuida, ─prosiguió─ nunca olvido las promesas a los pacientes.
Mildred se encaminó al vestidor para cambiarse el uniforme y decidió volver después a la cafetería, para desconectar tomando un descafeinado antes de marcharse. 
La tensión sexual crecía por momentos dentro de Robert, que, obteniendo su café, fue a sentarse a una mesa apartada.
Sin saberse observada, recogió del suelo la moneda que se le había caído, elevando al agacharse la parte trasera de su falda al límite de sus muslos. Tocaba con suavidad los botones de la máquina, recogía el vaso y la cucharilla, mientras, en los pensamientos libidinosos de Robert aparecía él mismo entre esas delicadas manos femeninas. De pie, atenta al ajetreo exterior a través de la ventana, Mily bebía despacio, el vapor le humedecía los labios, avivando su natural rojo, los cuales Robert admiraba boquiabierto. 

Ya en casa, tanto Mily como Robert cumplieron con los requerimientos sexuales de sus respectivas parejas. «Requerimientos» monótonos, donde para escapar de la rutina marital, instalaron morbosamente en su cerebro una imagen ajena, buscando en un cuerpo conocido las sensaciones de otro, para tocar el cielo.

Semana tras semana el trabajo en el hospital y los roces aquí, risas allá, palabras de tonteo muy a menudo, hacían que la simpatía y el acercamiento creciera entre Robert y Mily.
Llega otro fin de semana, donde la noche del viernes emitían en su pequeña ciudad el clásico Gone with the wind
Mily acudió al cine con su marido, y Robert con su esposa.
Había pasado media hora de película cuando Mily atravesó la sala hacia el lavabo. Robert, ubicado casi al final, alucinó incrédulo de su suerte. Se levantó sin perder tiempo y fue tras Mily.
En el pasillo, en la puerta del servicio, Mily se apoyó contra la pared y le clavó la mirada en sus ojos verdes, esta vez muy abiertos y brillantes. Robert apoyó su palma izquierda por encima del hombro de ella contra la pared y con la derecha la rodeó por la cintura sin pestañear. Mily le acercó sensualmente los labios y él le atrapó la boca arrebatado por el deseo. 
Girando en una especie de vals, marcando el ritmo los besos y caricias subidas de tono, entraron al lavabo masculino, encerrándose en un habitáculo individual. En una posición nada ortodoxa, pero sí bien definida que les permitía saciar su apetito carnal; desahogaron las ganas acumuladas en la piel, agotaron fuerzas derramando fluidos, utilizaron los húmedos medios a su alcance para sentirse, para enaltecer ese interno ardor que les quemaba, y, porqué no, para quererse.

Ahí estaba el... ¿problema, quizá? En el fondo se arraigaba un cariño, un perfecto complemento entre uno y otro: laboralmente, como amigos, en seguridad... sentían una dulce confianza única, que les unía más allá del deseo.



El presente año que se acababa, acabaría también la presencia de Robert en el hospital. Le había surgido una oportunidad irrecusable en el extranjero, se trasladaría a otro continente, pero antes le había prometido a Mily que volvería y se casarían.


En el aire quedaban las palabras tiernas, las sonrisas cómplices, las promesas que le había enseñado a Mily a decir... la promesa que él mismo le había hecho.
Un incierto y desolador futuro le aguardaba a ella, que ya contaba con rehacer su vida con él.

Amenazaba lluvia la tarde que partió, a través de la puerta acristalada del hospital, ella le hizo un triste gesto cuando él se volvió a verla una vez más: recuerda tu promesa.
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54 comentarios:

  1. Hola Carla,
    Un historia de lo incierto y de promesas a partir. Bien mostrado. Un final abierto que da la misma inseguridad de Milly.
    Suerte en el concurso. Un abrazo

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    1. Hola, Juana. Eso quería mostrar, me conforma el hecho de haberlo conseguido. Mira que los finales abiertos no me gusta leerlos para nada, y al final veo que no se me dan tan mal al escribirlos. Vaya contradicción!
      Un besazo y gracias por tu aliento.

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  2. Ay! A veces las promesas... Muy buena historia, Carla. Mucha suerte.

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    1. A veces, muchas veces, Marta. Muchas gracias por dejarme tu impresión y por pasarte por aquí. Suerte ─de nuevo─ para tí también!, ya que has logrado tener tu puesto dentro de los más destacados. Un abrazo.

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  3. Hola Carla! Muy romántico (y en ocasiones tórrido) tu relato. Me ha gustado mucho, con esa mezcla al final de incertidumbre y de esperanza. Felicidades y mucha suerte. Un abrazo!

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    1. Qué amable, Beri, por tus calificaciones a mi relato. No se sabe qué pasará, las puertas están abiertas a la imaginación. Toda la suerte para tí que te la mereces, te devuelvo el abrazo.

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  4. Es hermoso como escribes bella mujer
    te deseo toda la suerte del mundo

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    1. Muchísimas gracias amiga Mucha, la verdad es que necesitaré mucha suerte, hay por el Tintero gigantes reales que dan mucho miedo. Gracias de nuevo!!

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  5. Gracias, Carla, por tu relato. Buena suerte en El Tintero.

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    1. Gracias a ti, Beba, por la atención que me brindas a través de tus comentarios. No está de más desearte suerte ¡de nuevo!
      Un abrazo fuerte en la distancia.

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  6. Una historia romántica donde el futuro es incierto. Y más para esta pareja que cuenta con una vida de casados.Saludos desde Venezuela

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    1. Así es Raquel, al ser una situación sentimental difícil que no siempre ve la luz, me pareció atractiva plasmarla dentro del tema del concurso.
      Abrazote y mucha suerte.

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  7. Una historia que has conseguido cargar de sensualidad, por momentos bastante gráfica, en la que el deseo de ambos amantes escapa a través de la pantalla hacia nosotros. Un tema muy real, el hastío que muchas veces se da en las parejas y que lleva a buscar la pasión en otras puertas. La ambientación en el hospital le da un toque original y acompaña bien la trama. Al final sólo queda una promesa de amor, que daría para una continuación. Te deseo mucha suerte en el Tintero, Carla. Un saludo.

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    1. Sí, me he pasado con la «sensualidad» je, je, llegando a ser gráfica, como dices. Mis dedos teclean, se posicionan en la historia y no paran hasta el... final. Ahora mismo cambio la última palabra del párrafo de los esposos respectivos. Sinceramente veía algo que no me gustaba del todo y era ese detalle. Las otras partes o lo que ocurrió en el servicio no lo cambiaré, me parece atrayente así como ha salido ji, ji. Espero que os guste a todos.
      Muy generoso tu analítico comentario y sí, también intento escribir sobre lo que en general no se habla en la calle, como ejemplo, este tema del hastío.
      Me pensaré lo de la continuación. Ya me pasaré por tu blog, que todavía me faltan varios, pero te adelanto mis más sincera ENHORABUENA!! por tu fantástico Tintero.
      Muchísimas gracias por tu tiempo y por tus deseos. Suerte, aunque ya la tienes contigo. ;·) Un saludo afectuoso.

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  8. ¡Hola, compañera Carla! Un gusto volver a visitarte.
    Su construcción nos ofrece interesantes descripciones de los personajes que nos facilitan la visualización de los mismos, así como de los distintos tonos que va tomando esa pasión que les envuelve, hasta dar rienda suelta a sus fantasías y tener ese encuentro íntimo que anhelan.
    Sin embargo a medida que llegamos al final vamos siendo conscientes como esos devaneos amorosos no van a poder fructificar en algo estable, pues como ya nos indica su título todo quedará en promesas y esas mismas promesas se las llevará el viento.
    Ya veo, apreciada compañera Carla, que también te atreviste a abordar con elegancia y tintes románticos, el género erótico, por lo que te felicito y deseo que obtengas un buen puesto en el concurso.
    Un abrazo.

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    1. Otra vez me quedó tu respuesta más abajo en los comentarios, querida Estrella.

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  9. Genial relato, Carla. Mucha suerte en el concurso querida amiga
    Abrazos!

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    1. Muchas gracias, dulce Marina. Cada vez busco algún relato tuyo sin éxito. Atrévete, tú puedes, escribes fenomenal.
      Otro abrazo.

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  10. Hola, Estrella, bienvenida de nuevo!! Intenté ir subiendo de a poco el tono sin pasarme de las novecientas y que tuviera sentido. En el medio marqué la presencia que ocupaba la vida de los protagonistas y al final, ya sabido solo una promesa. Ya nos adelantaba Robert que era adicto a prometer sin pensar en cumplir, lo hacía sin maldad, pero le gustaba prometer a todos en positivo y Mily no sería su excepción.
    Me atrajo la idea de condimentar el romanticismo con algo más picante, más palpable como el erotismo, para darle un poco más de énfasis al relato en general.
    Ja, ja, ja! Al final me atreví, sí, mi amiga. Quise tratar un tema que es más normal de lo que se quisiera, porque en el fondo son personas que sufren, aunque esté mal visto y no se acepte.
    Muchísimas gracias por tus palabras de aliento y tu minucioso comentario. El puesto en el concurso de momento lo tengo al participar con todos estos grandes de la escritura. Te deseo lo mejor, te mereces un lugar destacado!
    Besitos.

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  11. Una historia en la que relatas con acierto un final muy claro. Las promesas son solo eso, promesas, que a veces también se las lleva el viento.
    Suerte en el concurso.
    Un abrazo, Carla.

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    1. Gracias, Carmen. Como pasa en la realidad, a veces se puede cumplir y otras no, por mucho que pese no hacerlo.
      Las experiencias propias nos condicionan inconscientemente a pensar una cosa u otra.
      Una alegría tu visita, Carmen!!
      Dos besos y mucha suerte!

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  12. Una historia muy bien planteada, Carla, que gira en torno a esas "Promesas". Pero las promesas, como las cenizas de un amor, se las puede llevar el viento, para no regresar jamás.
    Mucha suerte en el concurso. Un abrazo enorme.

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    1. Agradezco enormemente que hayas sabido ver que esas promesas pueden ser"cenizas de amor", qué definición más dulce! Es lo que es, una demostración de amor, porque el final no está escrito, pueden (como la novela), irse con el viento, pero que él no le cumpla, no quiere decir que no la quiera. Puede ser que no pueda, para mantener su buena reputación aunque viva sufriendo por ella. El final está abierto; todo puede ser. Muchísimas gracias, Bruno, y toda la suerte para ti también. Abrazos.

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  13. Grandísimo relato, Carla. Las descripciones iniciales de cada personaje son muy visuales, me los he imaginado tal cual, y la trama que sigue es tan hipnótica como absorvente. Buen giro inicial, no pensaba que Robert estuviera casado, ya me lo veía como un "madurito sexy", pero ese dato ha retorcido la trama de buena manera. Intuí que iba a pasar lo incontrolable, pero la manera en la que vino... Eso es lo que más me ha gustado, a parte de su descripción; esa manera de desprender tensiones de forma inesperada cuando menos me ha resultado muy acertada. El final... Bueno, esperemos que sea un hombre de palabra.
    Un fuerte abrazo y mucha suerte.

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    1. Ante todo, Pepe, te felicito de corazón por estar entre los mejores con la granja!
      Te agradezco mucho tus palabras. Me alegra saber que la trama puede al menos animar a seguir leyendo. Quise tratar un tema todavía tabú, donde personas infelices buscan un escape. Un tema no reconocido pero muy real, con la tristeza que ello conlleva. La manera en que describí lo "incontrolable", responde a que quería dejar patente que también puede darse de esta manera tan atrevida (en el buen sentido), en el lavabo de un cine! Je, je. No es lo más normal del mundo, pero sí seguro que una fantasía silenciosa de muchos. Y qué decir de las promesas... tendemos a pensar que no se cumplen, pero la vida a veces nos sorprende.
      Inestimable tu comentario. Te devuelvo el abrazo y suerte:a por tu segunda parte!!

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    2. Al decir que "puede darse de esta manera tan atrevida", me refiero a que el amor verdadero también puede comenzar entre colegas que pasan tiempo juntos y se desahogan en un arrebato. Al fin y al cabo el amor es también pasión. Un saludo.

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  14. Hola Carla. En esta edición a las chicas (aún no he leído a todos los compañeros), nos ha dado por escribir sobre la pasión en todas sus vertientes, y lo hacemos de modo diversos, así que es una gozada leeros porque las diferentes formas de enfocar el amor-pasión es toda una lección de aprendizaje.
    El tuyo lo veo más como atracción y pasión que como amor, no es un juicio de valor, es una impresión, a pesar de que el final lo dejas abierto a un posible reencuentro.
    Ambos lo tenían fácil y a mano, pues trabajaban juntos, y algo muy típico tópico, médico y enfermera.

    Una doble vida por parte de ambos. Creo que Milly espera más de lo qu él está dispuesto a dar por mucho que prometa.

    ¡Ayy las cosas de la folganza... es lo que tienen!

    Un abrazo Carla, hasta muy pronto compañera.

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    1. Hola, Isabel, gracias por dejarme tu impresión. El relato muestra que a través de una pasión inicial se puede llegar al amor, varias partes están muy claras al respecto. Entiendo que impactan las escenas subidas de tono y pueden opacar frente a los ojos del lector el cariño que surge entre los protagonistas, pero ahí está muy presente. No es el esperado relato cuadriculado donde se comienza con dulzura, se desarrolla con cariño y se acaba en pasión, ya que la vida no es cuadriculada y sí que puede darse un gran amor romántico comenzando al revés, más cuando se acaba con una mirada entrañable de los protagonistas. Muchas gracias por tu presencia y te deseo lo mejor en el concurso.

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  15. La historia de una pasión prohibida que surge imparable y se adueña de la razón de sus protagonistas. Robert y Mildred llevan una doble y peligrosa vida, dejándose llevar por sus instintos y cumpliendo con sus respectivos cónyuges.
    Creo que sabes trasmitir muy bien el deseo que se despiertan mutuamente, los momentos de tensa espera, el acusado contraste con la rutina del hogar y, finalmente, el estallido de la erupción largamente contenida, erupción que se apaga y sólo deja humo y cenizas en forma de promesas que nunca se cumplirán.
    Mucha Suerte en El Tintero. Un abrazo, Carla.

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    1. Upsss, creo que me quedó separada la respuesta a tu comentario (aparece más abajo). Gracias Paco.

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  16. Gracias, Paco, por pasarte por aquí. Al igual que el comentario anterior destacas la parte pasional del relato, y repito yo también que es fácil dejarse llevar únicamente por esta parte, sin tener en cuenta que el amor va creciendo con la unión que hay entre los protagonistas. No se describen detalles exclusivamente románticos porque el romanticismo lo llevan implícito los personjes en su conducta. Como la vida misma: se dice que, al final de las palabras lo único que importan siempre son los hechos. La promesa se piensa que no se cumplirá pero la realidad puede ser otra, ya que revela todo el amor que él siente al girarse a verla, si no, ni siquiera la hubiera mirado al irse. Muchas gracias por tu tiempo y felicidades de nuevo por tu Tintero en la granja. Un abrazo.

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  17. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  18. Cuando surge una atracción, puede llegar a ser fatal si los atraídos tienen sus vidas hechas con terceros en discordia. Es más habitual de los que parece, lo que pasa que de estos temas como bien dices no se suele hablar con franqueza.
    destaco de tu relato la alta carga de sensualidad y sexualidad con la que lo has aderezado, cosa que es muy de agradecer en estos tiempos en los que la sal y la pimienta parecen andar escasas.
    Un tierno abrazo y mis mejores deseos de fortuna.

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    1. Muchas gracias, Francisco, por tu cuidado comentario. Me gusta escribir de temas que no se habla, porque me agrada que secretamente el lector se identifique con alguno de mis personajes, después de todo, sólo trabscribo la vida. Y el amor más romántico puede surgir de mil maneras, incluso comenzado por el deseo. Que guste o no, es otra cosa. Te devuelvo el abrazo y mis mejores deseos para tí también. Gracias.

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    2. TRANSCRIBO, quise poner, otra vez mi dedo travieso escapando de las letras correctas. Un saludo.

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  19. Hola Carla

    El amor y sus complicaciones!!!

    Un saludo y suerte en el Tintero

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    1. Tan solo dos palabras te han bastado para definirlo, muchas gracias!!
      Muy cierto, Paola, muy cierto.
      Un saludo afectuoso y te deseo lo mejor en el concurso.

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  20. Carla has escrito un buen relato lleno de erotismo y sensualidad. Pero esas promesas se puede diluir con el viento. Suerte en el tintero. Un abrazo.

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    1. Imprevisto lo que puede suceder, Mamen. Esas promesas de amor tan románticas del relato, también pueden desvanecerse El amor es así, erótico, sensual e imprevisto. Gracias por tus elogiosas palabras. Una buena parte de suerte ya tengo al recibir cada comentario de los compañeros, muchas gracias y mucha suerte también. Te devuelvo el abrazo fuerte.

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  21. Carla qué buena eres creando
    sintiendo
    amando
    o viviendo los sueños que vas creando
    Me gusta tu estilo corto clásico lleno de emociones donde nos llevas de la mano por ese momento de tu escritura que tan maravillosamente has creado

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    1. Gracias amiga Mucha, por tu amable comentario. Me reconforta que te guste lo que escribo y que estés aquí dejándome tu cariño.
      Dos besos.

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  22. Buenas, Carla.

    ¡Ay! Esa tensión entre dos personas es, para mi gusto, uno de los mejores momentos de una relación, cuando aún no ha pasado nada, todo está por decir, y el ambiente se llena de emociones.

    Nos leemos.

    Un saludo.

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    1. Gracias, Irene. Sin duda el mejor momento, cuando todo está por venir, coincido contigo. Porque una vez instalada la relación surge la duda del ¿hasta cuándo?, en cambio al principio no se duda de lo que vendrá. Un placer leer tus escritos también, amiga.
      Besitos.

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  23. Hola, Carla. Me ha gustado el tono y el ritmo de tu relato. Como dicen más arriba, estas historias son más usuales de lo que se cuenta. El final abierto está cargado de sentido ya que reafirma lo que el médico decía a sus pacientes. Se salvará este incipiente amor?
    Un abrazo y mucha suerte

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    1. El amor son solo dudas ¿acaso no?, por cuánto tiempo se está realmente "seguro" del amor presente? Por amor se mata, se muere, se cela, se llora, se ríe, etc. El amor siempre tiene un final abierto, por mucho que nos empeñemos en lo que sea que queramos que pase, hasta nuestro último suspiro, el final del amor está abierto.
      Muchas gracias, Mirna, por tu presencia y tus palabras de ánimo a mis escritos.
      Besitos, y reitero mis felicitaciones por estar el tuyo entre los mejores relatos en la edición anterior del Tintero en la granja. Lo mereces!

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  24. Saludos Carla, un relato muy romántico y apasionado de dos amantes que ojalá puedan unirse otra vez y vivir su amor juntos por siempre. Éxitos y bendiciones!

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    1. Agradezco con alegría tus deseos, Mery. Ojalá puedan unirse, el futuro es incierto, ojalá sea una historia en positivo, ya hay demasiado negativo en el mundo. Un abrazo y que la suerte te acompañe!

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  25. Hola Carla, como nos enganchan las historias de amor, aunque la tuya comienza con una pasión laboral, de estas hay muchas más de las que nos podemos imaginar.Después la relación se afianza o no. Un final abierto ha sido lo más acertado. Un abrazote

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    1. El siguiente comentario es tu respuesta,Emerencia, me ha quedado separado. ;-)

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  26. Uno de los requisitos del concurso era precisamente una historia de amor, así que fue este el que elegí. Una historia normal reflejando la realidad. Aderecé con un poco de erotismo y pasión para darle un poco de acción al relato. Menciono levemente "Lo que el viento se llevó" dando paso a la acción siguiente del lavabo, en un intento de dar idea de que eso es precisamente lo que se va con el viento: las promesas de Robert, por una parte, porque como el final es abierto, todo puede suceder. Es una alegría contar con tu presencia por aquí, te mando un abrazo fuerte, toda la suerte para ti y ¡¡gracias!!

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  27. Buen relato de una pasión, que por lo que augura el final y el título, puede quedarse tan sólo en promesas.Me gusta la elegancia con que has narrado la escena pasional y erótica. Saludos y suerte en el Tintero.

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    1. Muchas gracias, Jose, por tus palabras. Una lástima cuando se prometen cosas con amor y después la realidad no permite quizá cumplir. Me alegra que te haya gustado la escena sensual, intenté que se entendiera bien sin ser vulgar. Si he conseguido una pequeña parte, me alegra.
      Te felicito una vez más por tu magnífico Tintero en la granja.
      Un abrazo.

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  28. Has escrito el principio de una relación con un futuro incierto, un reflejo de la vida misma. Como dicen los compañeros describes muy bien los momentos y las situaciones en las que es encuentran los protagonistas.
    Un abrazo Carla y suerte en el concurso.
    Puri

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    1. Gracia, Puri, han impactado las escenas sensuales, pero también está la mirada mutua antes de partir, el cariño creciente, la confianza que se tenían... el creer de los protagonistas que tenían una segunda oportunidad de ser felices. Espero en resumen que les haya gustado.
      Un abrazo, y te deseo el mejor de los éxitos!

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